Equilibrar el trabajo con las responsabilidades de cuidar a un sobreviviente de un accidente cerebrovascular (ACV) es una realidad desafiante para muchas familias. Como cuidador, a menudo estás compaginando tu empleo, las tareas del hogar y las necesidades de la persona que cuidas, lo cual puede ser abrumador. Con una planificación cuidadosa y estrategias de autocuidado, es posible gestionar ambos roles de manera eficaz. Aquí te ofrecemos consejos prácticos para ayudarte a equilibrar el trabajo y las responsabilidades de cuidado, mantener tu bienestar y cumplir con tus metas laborales.
1. Comunica tus Necesidades con tu Empleador
El primer paso para equilibrar las tareas de cuidado y el trabajo es tener una conversación honesta con tu empleador. Muchas empresas entienden los desafíos que enfrentan los cuidadores y pueden estar dispuestas a hacer ajustes. Considera estos puntos:
- Solicita Horarios Flexibles: Si en tu trabajo permiten horarios flexibles, esto puede ayudarte a manejar tanto tus tareas laborales como las de cuidado. Incluso ajustes menores, como comenzar o terminar tu día una hora antes, pueden crear más tiempo para el cuidado.
- Opciones de Trabajo Remoto: Algunas empresas permiten que los empleados trabajen desde casa o tomen ciertos días fuera de la oficina. Esta flexibilidad puede ser especialmente valiosa si la persona que cuidas necesita supervisión constante o ayuda con tareas diarias.
- Explora Opciones de Licencia Pagada: La Ley de Ausencia Familiar y Médica (FMLA) en los EE.UU. permite a empleados elegibles hasta 12 semanas de licencia no remunerada. Infórmate si calificas para este beneficio o consulta sobre otras opciones de licencia específicas de la empresa.
2. Organiza y Prioriza Tareas
Llevar un registro de las responsabilidades laborales y de cuidado requiere habilidades organizativas. Considera estas estrategias:
- Usa una Agenda o Aplicación: Un calendario o una aplicación de planificación pueden ayudarte a seguir las citas médicas, sesiones de terapia, reuniones laborales y fechas límite. Configurar recordatorios te asegura no olvidar ninguna tarea crítica.
- Prioriza Tareas Diarias: Comienza cada día enumerando y priorizando tus tareas. Atiende primero las responsabilidades más importantes y delega tareas a otros miembros de la familia o amigos si es posible.
- Abraza Técnicas de Gestión del Tiempo: Técnicas como el “bloqueo de tiempo,” donde dedicas tiempos específicos a tareas focalizadas, pueden mejorar la productividad y prevenir el agotamiento.
3. Busca Apoyo de Familia y Amigos
El cuidado debe ser una responsabilidad compartida, así que apóyate en amigos y familiares para obtener ayuda. No tienes que hacerlo todo solo:
- Crea una Red de Apoyo: Comunícate regularmente con los miembros de la familia sobre las necesidades y el horario de la persona a la que cuidas. Rota responsabilidades como citas médicas, compras de alimentos o tareas del hogar.
- Designa Cuidadores de Respaldo: Identifica amigos o familiares de confianza que puedan reemplazarte en días en que el trabajo demande toda tu atención. Saber que tienes un respaldo te brinda tranquilidad y flexibilidad.
- Considera Recursos Comunitarios: Muchas organizaciones y grupos de apoyo ofrecen cuidado temporal o servicios de apoyo.
4. Establece Límites para Proteger tu Bienestar
Es esencial establecer límites que te permitan equilibrar las responsabilidades de cuidado sin sacrificar tu salud mental ni tu productividad en el trabajo.
- Establece Límites Laborales: Informa a tus colegas cuándo estás disponible y cuándo no. Trata de evitar responder correos electrónicos o llamadas laborales durante el tiempo personal de cuidado y viceversa.
- Tómate Tiempo para el Autocuidado: Como cuidador, es fácil pasar por alto tus propias necesidades. Asegúrate de tener tiempo para recargar energías, ya sea un momento tranquilo para tomar café, hacer ejercicio o pasar tiempo con amigos. Incluso los descansos breves pueden refrescar tu mente y reducir el estrés.
5. Utiliza Servicios de Apoyo Profesional
Existen servicios profesionales disponibles que pueden facilitar las demandas de cuidar. Aquí hay algunos que podrían ayudarte:
- Asistentes de Salud en el Hogar: Si tu ser querido necesita ayuda con tareas médicas, considera contratar un asistente de salud a tiempo parcial o completo. Este servicio puede aliviar algunas responsabilidades de cuidado y permitirte concentrarte en tu trabajo.
- Servicios Terapéuticos: Las terapias físicas, del habla y ocupacionales suelen ser esenciales para los sobrevivientes de accidentes cerebrovasculares. Muchas comunidades cuentan con terapeutas que pueden acudir al hogar, ahorrándote tiempo y esfuerzo.
- Servicios de Consejería en Línea: Para los cuidadores que experimentan agotamiento, servicios de consejería en línea como BetterHelp ofrecen apoyo de salud mental, permitiéndote hablar con alguien y obtener estrategias de afrontamiento sin necesidad de desplazarte.
6. Busca Empleadores Amigables con los Cuidadores
Si estás considerando un cambio de trabajo, busca empresas que apoyen a los cuidadores con políticas flexibles. Estas empresas a menudo tienen programas específicos para empleados con responsabilidades de cuidado, tales como:
- Arreglos Laborales Flexibles: Busca empresas que promuevan el trabajo remoto, horarios flexibles o el trabajo compartido.
- Programas de Asistencia al Empleado (PAE): Los PAE suelen incluir recursos de salud mental, consejería y otros apoyos para cuidadores.
- Licencia Pagada para Cuidadores: Algunas empresas ofrecen licencia pagada para cuidadores, más allá de lo que exige la FMLA. Investiga a los empleadores potenciales e infórmate sobre sus políticas de apoyo a cuidadores.
7. Aprovecha la Tecnología
La tecnología puede aliviar parte del estrés de cuidar. Aquí tienes algunas herramientas que considerar:
- Aplicaciones para la Gestión de la Salud: Aplicaciones como CareZone o CaringBridge te permiten llevar un registro de medicamentos, historiales médicos y citas.
- Plataformas de Comunicación: Si varios miembros de la familia están involucrados en el cuidado, herramientas como Google Calendar o grupos de WhatsApp pueden simplificar la coordinación.
- Servicios de Entrega: Usa servicios de entrega de alimentos o productos para ahorrar tiempo y energía, permitiéndote centrarte en el cuidado y el trabajo.
Equilibrar el trabajo con las responsabilidades de cuidar es una tarea desafiante, pero con las estrategias y el apoyo adecuados, es manejable. Prioriza la comunicación con tu empleador, apóyate en la familia y amigos y busca recursos profesionales siempre que sea posible. Y lo más importante, recuerda que cuidar de ti mismo es tan crucial como cuidar de tu ser querido.