Un cuidador rara vez está “listo” para comenzar a cuidar de alguien que lucha contra una enfermedad. Y, lamentablemente, el accidente cerebrovascular no se anuncia con suficiente tiempo para prepararse como cuidador.
De alguna manera, Dawn se había estado preparando para este papel durante muchos años. Su esposo, Daran, había sufrido el síndrome de Guillain-Barré hace 18 años y sobrevivió al cáncer en etapa 4 hace 10 años. Habían pasado por tratamientos, terapias, recuperaciones y todo lo que implica el cáncer.
Fue el 26 de noviembre de 2019 cuando Daran sufrió un accidente cerebrovascular isquémico mientras estaba en su casa. Alrededor de las 3:30 p. m., Daran no podía hablar y tenía problemas para caminar. El tío de Dawn, Randy, estaba con Daran en ese momento y se dio cuenta de que esos eran síntomas de un accidente cerebrovascular y llamó al 911 de inmediato. La ambulancia llegó en 15 minutos.
Daran vivía en Houston, Texas, y contaba con una extensa red de excelentes hospitales, por lo que pudo recibir tratamiento en cuanto llegó al hospital. Tratar los accidentes cerebrovasculares en un período de dos horas después de que se diagnostican es esencial para salvar la vida de esa persona y reducir los efectos del accidente cerebrovascular (afasia, parálisis, espasticidad, etc.). Daran tuvo que someterse a una cirugía para eliminar el coágulo en su arteria, pero el lado derecho del cuerpo estaba paralizado, lo que requirió una rehabilitación física significativa.
Dawn compartió esta historia con nosotros junto con algunos consejos importantes que podrían ayudar a otros cuidadores que necesitan orientación o apoyo. Le hicimos tres preguntas a Dawn:
¿Cuáles son tres consejos o sugerencias que puede dar a quienes cuidan a un sobreviviente de un accidente cerebrovascular?
Coach de atención
Sí, como cuidador, se supone que debe asegurarse de que la persona a la que cuida tome sus medicamentos, vaya al baño y coma todas las comidas. Pero hay poder en actuar como entrenador: motívelos y anímelos, hágales saber que está con ellos y que no están solos. Piensa en cómo comunicarles tu compromiso y establece metas y límites para tu rol como Care Coach.
Elimina tu ego de la situación
Pedir ayuda no es ser débil. Pedir ayuda a familiares y amigos es lo que te ayudará a ser un mejor Care Coach para la persona que estás cuidando. Reúne a quienes te rodean para que te ayuden; ya sea limpiando la casa una vez a la semana, corriendo al supermercado para comprar comida o cualquier cosa que puedas necesitar; acércate y pide ayuda. Todos están dispuestos a ayudar.
Celebra, incluso las cosas pequeñas
La recuperación de un accidente cerebrovascular puede parecer interminable, por lo que es importante establecer hitos y celebrarlos, por pequeños que sean o parezcan. Nuevos movimientos, nueva fuerza, una nueva palabra, un nuevo recuerdo: todas esas son cosas que vale la pena celebrar.
¿Cómo te has mantenido mental y físicamente saludable mientras cuidabas a tu esposo?
Manteniendo la fe
Personalmente, he encontrado que la oración y la fe me ayudaron a superar la recuperación de Daran. Me ha ayudado a encontrar formas de ser agradecida, pedir a los demás que oren por mí cuando estoy agotada y poner las cosas en perspectiva para mantenerme positiva y motivada.
Autoconservación
Encuentra algo que te haga sentir bien, haz algo por TI. Ser amable contigo misma es de gran ayuda, así que asegúrate de tomarte un tiempo de tu día para pensar en cómo te estás cuidando.
Organización
La información es poder y cuando esa información está organizada, eres imparable. Me aseguré de conocer todo el historial médico de Daran, todos los medicamentos que tomaba, documenté los avances en su recuperación y los nuevos síntomas, y lo mantuve todo organizado. Como coach de atención, soy una defensora de Daran, por lo que necesitaba estar lista y dispuesta a tomar decisiones por él.
El derrame cerebral de Daran ocurrió el 26 de noviembre de 2019. Quedó 100% paralizado del lado derecho y no pudo hablar durante meses. Estuvo hospitalizado en la UCI y en rehabilitación para pacientes internados durante 24 días después del derrame cerebral. Cuando le dieron el alta, fue justo antes de Navidad. No tenía idea de qué impacto tendría eso en mí y traté de seguir a mi ritmo habitual sin éxito. Era como si estuviera tratando de pensar en el barro y las tareas fáciles habituales me llevaran 5000 veces más tiempo de lo que normalmente me hubieran llevado.
No digo esto a la ligera. Muchas personas han perdido la vida y el sustento debido a la pandemia. Sin embargo, cuando el mundo entero se detuvo a fines de marzo de 2020 y continuó durante estos últimos nueve meses, el regalo de COVID para Daran y para mí fue que nos dio el espacio y el tiempo para sanar.
A través de los altibajos de la recuperación posterior a un derrame cerebral, Dawn se inspiró para compartir su historia con otras personas con la esperanza de marcar una diferencia en la vida de alguien. Cuidar a alguien puede ser una tarea solitaria, pero no estás solo. Existe una gran comunidad de personas como Dawn que han desarrollado su resiliencia y han aprendido lecciones valiosas, y que están dispuestas a compartir sus historias, brindar orientación y apoyo, y alentar a otras personas que están cuidando a un sobreviviente de un derrame cerebral.
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